Si bien el chimichurri es un acompañamiento clásico y como condimento para casi cualquier corte de carne en Argentina, desde el choripán (chorizo a la parrilla) hasta las empanadas de carne. Se trata de una mezcla de perejil finamente picado, orégano, chile molido y ajo picado mezclado con vinagre y aceite vegetal. Es una salsa verde brillante que aunque parece pesto italiano, es algo completamente diferente
En nuestras experiencias en el asador y la cocina, hemos notado que los pretextos para reunirse a preparar un asado o carne asada pueden necesitar que cada vez que uno las prepara tenga que encontrar el mejor acompañamiento para hacerla cada vez única y diferente. Esta salsa argentina la hemos mexicanizado agregándole algunos detalles que difieren de la receta original y tradicional.
Y tomando como base este dicho de Eduardo Massa Alcantara, chef argentino, “El Chimichurri significa amistad y, en Argentina, esto tiene un significado que no existe en otros lugares del mundo”, en México las reuniones para comer son solamente un pretexto más para ver a los amigos y la familia, entonces, adoptamos la idea de que el chimichurri es amistad en Argentina pero en México también.
Anímate a probarlo y prepararlo para tu siguiente reunión.
- Tiempo de preparación10 min
- Tiempo de cocción10 min
- Tiempo de cocina1 hr
- Total1 hr 20 min
Ingredientes
- Perejil fresco, lavado, pero seco y finamente picado / 1 manojo
- Perejil seco / 1 cucharada
- Ajo, machacados en mortero o molcajete / 8 dientes de ajo
- Aceite de aguacate / 1 taza
- Vinagre blanco / 1 cucharadita
- Vinagre de sidra de manzana / ½ cucharadita
- Chile quebrado / ½ cucharadita
- Chile en polvo (chile de árbol o guajillo) o puedes usar paprika / ½ cucharada
- Cebolla deshidratada en hojuelas (de preferencia) o granulada / ½ cucharada
- Tomillo seco / ½ cucharada
- Orégano seco / 1 cucharada
- Sal fina / ½ cucharada
- Pimienta negra recién molida / ½ cucharada
Preparación
Vamos a empezar todo esto en un molcajete o mortero, coloca los dientes de ajo y muélelos hasta tener una pasta uniforme.
En una tabla de picar, pica finamente el perejil fresco, el cual lavaste y desinfectaste previamente y dejaste a secar por completo; para esto puedes utilizar toallas de papel donde lo seques haciendo presión un par de veces y dejarlo reposar un rato para que toda el agua se termine de secar.
Y ahora si, a mezclar.
En un frasco con tapa, mezcla todos los ingredientes secos, el perejil picado, el tomillo, el orégano, el chile en polvo y el chile quebrado, la sal, la pimienta, la cebolla deshidratada, el perejil seco y finalmente la pasta de ajos que sacaste del mortero. Mezcla con una cuchara dentro del frasco.
Ahora, integra en el frasco el aceite de aguacate, que es más neutro su sabor al tradicional aceite de oliva, que puede sutilizar en caso de no tener de aguacate, el vinagre blanco y el vinagre de sidra de manzana.
Revuelve.
Tapa el frasco y agita bien.
El sabor y olor debe ser excepcional recién hecho, pero si esperas al menos 24 horas para probarlo notaras que es entonces que realmente sabe espectacular. guárdalo en el refrigerador y utilízalo al día siguiente, sacándolo a que tempere al menos una hora antes de servir.
Sobre un corte de carne, sobre una torta de chorizo, sobre una empanada argentina, vaya, realmente notaras el gran sabor que tiene esta salsa.
Puedes conservarlo de tres a cuatro semanas en el refrigerador.